Ahora amigo lector cierre los ojos y ábralos en 2013 y envuélvase en el “plan económico” de la Patria que trajo Maduro quien sabia perfectamente que el país entraría en serios problemas de pagos, y eso antes de ganar las elecciones de marzo, acotemos que él se encargó del poder al morir Chávez a finales de 2012. ¿Pero que lo que hizo Maduro al comienzo de su gestión antes de ser electo? Abstrayendo naturales diferencias de época, historia y tecnológica, y con unos 100 años de diferencia Maduro hizo lo mismo de Lenin, acelero controles, expandió el gasto público y ordeno monetizar masivamente el creciente déficit fiscal.
A muchos les costó comprender algunos fenómenos, leíamos análisis económicos realizados en la época entre Enero Marzo del 2013 que el déficit fiscal era de “apenas” un 12%, cuando en realidad el doble, 24% lo que le daba una certificación de insostenibilidad, lo cual lo haría crecer sin límites, -hoy anda en el 50% del PIB. Maduro fue más “Smart” que Lenin, apagó las luces y prohibió la publicación de los precios, impuso controles totales, los precios no se publicaban por orden del gobierno y así nadie sabrá o estaría informado del curso de la hiperinflación, Sin embargo los análisis económicos diversos trabajaban con la data oficial, sabiéndose que estaba manipulada y que no haría congruente el desempeño económico y la espiral inflacionaria, y el fenómeno de “debasement” que ocurría con la moneda, era lógico que Venezuela entraba en el umbral hiperinflacionario..
Pero como el gas en la botella, este conseguirá por donde salir, incluyendo la explosión de la botella, el dólar paralelo brincó de 8.9 Bs por dólar a finales del 2012 a 24Bs /$ en Febrero del 2013, dos meses después, y desde allí nadie lo pararía, nada que la historia monetaria de Venezuela no registre, Algunos muy pichones aun no les había dado tiempo de aprender la historia y por ello sus apuestas de usar los dólares de sus ahorros y cambiarlos en bolívares porque supuestamente vendía una poderosa revaluación del Bolivar, profecías nunca acertadas por una razón sencilla: el precio del dólar paralelo estaba reflejando la represión de las decretos leyes para los controles, escasez, colas y racionamiento y envilecimiento del Bolivar, la mismo que le ocurrió al rublo ruso en 1920.
Lo demás era sencillo, ese enorme déficit fiscal era el anverso de una moneda que tenía por el otro lado el déficit descomunal en Balanza de Pagos. La ruta para la hiperinflación estaba abierta; en abril de 2013 escribí mi primera nota al respecto “Venezuela en el Umbral de la hiperinflación” y mi consejo de comprar dólares a todo precio porque en el mercado sobraban bolívares por “impresión inorgánica” y que el resultado sería una explosión hiperinflacionaria. Recordemos que el déficit de pagos se recrudece por el reforzamiento de los controles de cambio y precios, lo cual imposibilitaba a que la economía pudiera absorber las divisas que requería pero a precios mayores, o de equilibrio, de lo contrario no habría el requerido equilibrio en balanza de pagos y con ello una palanca de libertad económica que hubiera estimulado la oferta nacional e importada de bienes y servicios, Pero Maduro traía no las reflexiones de Lenin cuando echaba a rodar su NEP sino las colectivización forzosa via controles y expropiación de Stalin en 1928. Maduro impondría más fuerza a los torniquetes sobre precio de bienes y el dólar.
De esta manera al no verse las razones y lo que ocurriría posteriormente en el mercado del dólar paralelo, impidió que muchos analistas económicos y medios no aprendieran la presencia de la hiperinflación, la mayoría buscaba una hiperinflación a lo Weimar, pero olvidaban que ya antes de la Weimar se tenía de una hiperinflación en Rusia y en plena revolución. AL no aprender el fenómeno de explosión del precio del dólar en el mercado libre -paralelo- no se podría conocer que el genoma que hervía debajo delos decretos era la hiperinflación, y viceversa.